Era verles subir al escenario y millones de chicas de todo el mundo se abalanzaban y se soltaban el pelo ante sus canciones desenfadadas. En plena movida madrileña, David, Rafa, Javi y Dani bebieron del éxito de los “Hombres G” como nunca antes nadie lo había hecho en nuestro país. Cientos de miles de discos vendidos, fans enloquecidas y giras musicales por toda Latinoamérica les llevó a consagrarse como una de las bandas españolas de pop rock con mayor trascendencia de los años 80. Aunque confiesan no entender dónde reside su atractivo, estos maduros chicos G siguen despertando pasiones entre el público femenino y esperan que las mujeres murcianas vuelvan a arroparle en su próximo concierto, el miércoles, 30 de abril, en el Auditorio Parque Fofó.
En Hombres G, ¿quién encontró a quien?
Javi y yo somos amigos desde que éramos niños, íbamos juntos al colegio y pasamos toda nuestra adolescencia juntos. A su vez, Javi conocía a Dani de sus vacaciones en la sierra, era su amigo de toda la vida. Entre los tres formamos un grupillo de música y como teníamos algún enchufe en televisión pues, de vez en cuando, nos llamaban para hacer de figuración en programas donde actuaba algún artista como “Aplausos” o “Tocata”. Allí fue donde conocimos a Rafa. Por aquel entonces, él tenía 21 años y nosotros 17. En la tele nos pagaban una fortuna por hacer de figurantes: ¡5.000 pelas!.
Y ahí es donde a empieza a gestarse la semilla de lo que más tarde se convirtió en un fenómeno social sin precedentes
En aquella época los grupos se montaban sin muchas pretensiones. La idea era mantener un hobby, sacar las pelas suficientes para pagar el local de ensayo. El nuestro, por cierto, era un local pequeñito que además apestaba a humedad impresionantemente (risas). Pero allí es donde nos reuníamos cuando salíamos del colegio o de la Universidad y nos lo pasábamos bomba intentando montar nuestras cancioncillas. ¡Y qué decirte cuando hacíamos un concierto!. ¡Eso sí que era una fiesta!. Venían todos nuestros amigos, nuestra familia… Era otra óptica. En aquel momento nunca pensamos que estábamos tomando decisiones importantes. Simplemente vivíamos la vida y nos lo pasábamos lo mejor que podíamos.
¿Y por qué escogisteis la letra “G” del abecedario y no cualquier otra?
Pues mira. La culpa la tiene una película de los años 30 que se llamaba “G Men” (los hombres del gobierno) y como a mí me gusta mucho el cine negro americano pues, al principio, me dio por relacionar las portadas de los discos con los gánster y con todo ese mundillo. ¡Era un poco por darle sentido al nombre! (risas). Ahora, Hombres G ya no suena a FBI, ni a nada eso. Suena simplemente a nosotros mismos.
Pues para las fans de la época “G” era sinónimo de “chicos guapos”, “chicos cañón”…
(Risas) Nosotros nunca le dimos explicación, la verdad. Nunca fuimos un grupo diseñado para gustar a las niñas. En nuestro caso fue casual. Simplemente éramos un grupo de Madrid, que tocábamos en los garitos donde tocaban los demás. Y de repente nos explotó todo esto en la cara. La gente empezó a pensar que éramos monísimos (risas) y estalló este fenómeno fan que nunca justificamos. No lo entendimos en su día y todavía seguimos sin entenderlo. Por eso hicimos la canción de las chicas cocodrilo.
Es que a pesar de los calcetines blancos teníais mucho sex-appeal…
(Risas). Pues te juro que no lo entiendo. Recuerdo que cuando tocábamos en «Rock-Ola», casi todo el público eran tíos. Pero un día se me ocurrió asomarme antes de comenzar un concierto y me sorprendió ver a tantas chicas. Me metí y les dije a estos: «oye, hay un montón de tías ahí fuera y algunas están muy buenas». Empezaron todos a sacar la cabeza alucinando. Y al siguiente concierto, ¡ya todo el público eran tías!.
¿Y os pasaba como a Jesulín de Ubrique que las mujeres os lanzaban sujetadores o las fans de entonces eran más recatadas?
¡Para nada!. Después de la segunda canción nos resultaba imposible caminar por el escenario. Sujetadores encima de la batería, de los platos… ¡era una cosa surrealista!. Ahora, de vez en cuando, todavía alguna cachonda lanza alguno pero en aquella época era lo normal. Y en América, las locuras eran enormes: niñas que escalaban la fachada del hotel para llegar a mi habitación, que estaba en el quinto piso, para pedirme un autógrafo.
¿Y cuál fue tu reacción en ese instante?
Pues mira: cogerla, meterla para la habitación, firmarle el papelito que traía en la boca y mandarla por el ascensor para abajo otra vez (risas).
Desvelemos el misterio: ¿qué hizo Marta Madruga para convertirse en tu Marta del marcapasos?
Mi mujer es mi mujer desde que ella tenía 15 años. ¡La tuve que convencer porque no me quería la tía!
¡No me lo puedo creer!
(Risas) Pues sí…
El año 85 fue vuestro año. Nace la “Hombres G – Manía” y vuestra época de desenfreno musical
Aquello fue absolutamente demencial. Con 18 años éramos famosísimos y con 21 estábamos llenando estadios con 40.000 personas. Éramos muy jovencitos y conseguimos dar la campanada a la primera.
Y eso que hubo quien se aventuró a decir que erais unos niños de papá y que no llegaríais muy lejos…
Es normal que se produjera cierto hartazgo. Piensa que acabábamos de empezar y nos cayó todo encima, sin esperarlo. Pero es que además conseguimos mantener nuestro éxito haciendo canciones bonitas durante muchos años, luego supimos retirarnos a tiempo, también supimos volver en su momento y ahora llevamos otros 11 años haciendo conciertos, con canciones nuevas y un musical fabuloso. Además tenemos una gira en México impresionante en sitios con capacidad para 20.000 – 30.000 personas, con las entradas casi agotadas. Tú dime qué otro artista en las mismas circunstancias que nosotros ha conseguido mantener este nivel de felicidad personal y seguir dando guerra durante tanto tiempo.
Lo bonito de todo esto es que por muchos años que pasen, seguís siendo los mismos chicos de siempre…
Cada uno tenemos nuestro papel en el grupo pero lo más importante es que todos vamos en la misma dirección. Todo lo hacemos por consenso. Y lo que nos mantiene unidos es que somos buena gente y confiamos los unos en los otros. ¡Además de que nos reímos mucho juntos! Somos unos afortunados enormes y unos tíos muy sencillos. Para que te hagas una idea: cuando tenemos un bolo, quedamos todos, nos montamos en la furgoneta, charlamos por el camino, contamos chistes, comemos, hacemos el concierto y lo pasamos en grande viendo disfrutar a la gente de esa manera y después, nos vamos a tomarnos unas cervecitas… ¡Si es que somos unos privilegiados!
Entonces, ¿por qué desapareció “Hombres G”?
Estábamos muy cansados, muy saturados de nosotros mismos y decidimos parar. Piensa que los primeros años fueron muy arrolladores hasta el punto de llegar a afectarnos emocionalmente. Cada uno tiró entonces por su lado y yo empecé mi carrera en solitario. Sin embargo, en 2002 nos ofrecieron una gira fantástica en México y lo pasamos tan bien que decidimos seguir juntos.
Y ahora volvéis, literalmente hablando, «haciendo lo que os da la gana»
Nos sentimos unos afortunados. Tenemos la oportunidad de trabajar sin compañía discográfica, en nuestra propia oficina, con gente de nuestra absoluta confianza. No tenemos filtros de nada.
Y, por supuesto, subidos al carro de las nuevas tecnologías. ¡Muy bien chicos Fénix!. Reinventarse o morir.
Estamos adaptándonos a los cambios de una manera creativa y muy ilusionados. Por un lado, hemos visto que el formato del cd está ya totalmente abandonado. Las ventas son ridículas. Entonces lo que hacemos es apostar por las canciones dos a dos para que la gente las vaya escuchando y las puedan descargar en Internet. Y cada dos meses tenemos intención de sacar dos canciones nuevas. De manera, que siempre tendremos a nuestro público pendiente de algo nuevo, al mismo tiempo, que nosotros también lo pasamos bien dosificando nuestras canciones.
Yo no sé si después de todo lo que habéis conseguido os queda algo por alcanzar.
Absolutamente nada. Sólo nos queda que nos sigáis dejando estar. Tenemos la ilusión de seguir aprendiendo y de seguir haciendo cosas nuevas.
Con franqueza, David, ¿a quién le dirías hoy, en la actualidad, aquello de «Sufre Mamón»?
En este país, los que estamos sufriendo somos todos desgraciadamente. Hay muchos que nos hacen sufrir y seguro que son ellos los que nos dicen: “sufrid mamones”. Es terrible
¿Algún ritual antes de salir al escenario y que seguro pondréis en práctica el próximo 30 de abril en el Parque Fofó de Murcia?
No somos de rituales, ni manías. Lo único que hacemos antes de salir a un concierto es darnos un abrazo entre todos para transmitirnos un poquito de energía.
Pues danos tu energía y no te marches sin dedicarnos unas palabras a las murcianicas…
Quiero veros a todas en el concierto porque os aseguro que lo vamos a pasar muy bien. Murcia es muy especial para nosotros. Aquí la gente siempre nos ha acogido con un cariño impresionante. Ya teníamos ganas de volver. Para todas vosotras, un beso muy fuerte.
¡Beso recibido!
Ana Belén García. Periodista
son tan buenos ver su pelicula ahora me trae full recuerdos de mi infancia.
Pingback: ENTREVISTA A ARTURO FERNANDEZ: "LOS DE MI GENERACION SIEMPRE HEMOS ESTADO ORGULLOSOS DE IR LIMPIOS, BIEN VESTIDOS Y PERFUMADOS"
Pingback: ENTREVISTA A ARTURO FERNANDEZ: "LOS DE MI GENERACION SIEMPRE HEMOS ESTADO ORGULLOSOS DE IR LIMPIOS, BIEN VESTIDOS Y PERFUMADOS"
Pingback: Entrevista a José Manuel Casany. (Seguridad Social): "Ahora estamos con "30 años con Seguridad social" es una gozada como la gente viene a celebrar nuestros treinta años, en definitiva es un cumpleaños común"